
Así pues, en el próximo gran premio de Alemania, que se disputara en Nürburgring, los motores de los coches podrán enviar los gases al difusor.
El acuerdo alcanzado el pasado Domingo en el circuito de Silverstone, acabo con la polémica que se vivió en el Gran Premio de Inglaterra, después de que la FÍA quisiera regular el porcentaje de envío de gases desde el escape hacia el difusor cuando el piloto no acelera, hecho que proporciona notables ventajas aerodinámicas.
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